Después de 1 año y medio preso, la noche de ayer se sentenció a 13 años, 9 meses y 7 días en prisión al dirigente de oposición venezolano, Leopoldo López.
Luego de decenas de audiencias diferidas y de pruebas incongruentes presentadas por la parte demandante, la jueza Susana Barrientos declaró culpable a Leopoldo López, acusado de instigación pública, asociación para delinquir, daños a la propiedad e incendios, después de más de 12 horas de audiencia.
Sin embargo, la sentencia fue dictada sin la presentación de pruebas ni testigos que demostrarían la inocencia del ex alcalde del municipio Chacao de Caracas. Sumado a lo anterior, el desarrollo del juicio prácticamente en secreto y la negación de la presencia de la prensa y defensores de derechos humanos, demuestra que el juicio fue un chiste y estuvo sumergido en un ambiente de injusticia política.
De la misma manera, la defensa de Leopoldo López alegó en diferentes oportunidades, la no asociación de López con los estudiantes acusados y también rechazó la acusación de instigación a la violencia, contando con el criterio de la testigo clave de la Fiscalía, la lingüista Rosa Amelia Asuaje.
Es difícil demostrar la culpabilidad de una persona en tales delitos, cuando ni si quiera se tienen pruebas contundentes y reales de la participación e instigación de este en el evento. Ahora, la jueza Barrientos deberá explicar, en un documento público, en los próximos 10 días como llegó a la conclusión de la culpabilidad de Leopoldo López en los hechos del 12 de febrero de 2014, cosa que será interesante de leer; además de justificar la sentencia de los estudiantes Cristian Holdak, condenado a 10 años de prisión y a Ángel González y Demián Martín, condenados a 4 años y seis meses; también sin las pruebas necesarias.
Al contrario de López, los estudiantes fueron beneficiados con medidas humanitarias y no tendrán que cumplir la sentencia en prisión, sino que estarán bajo régimen de presentación cada 15 días.
Es inaudito como la justicia venezolana puede llegar a emitir estas sentencias alegando lo que alega, sin tener pruebas confiables de las acusaciones. Mucho se ha tildado al caso de Leopoldo López como un caso netamente político; con la sentencia de este jueves por la noche quedaron comprobadas estas acusaciones.
Lee también:
Petra Laszlo: la camarógrafa racista de Hungría
Donald Trump expulsó de su conferencia a Jorge Ramos
13 frases del coronel José Raga que le molestaron al gobierno de Venezuela