La violencia que han desatado las protestas en contra del gobierno de Nicolás Maduro ha cobrado la vida de 25 personas hasta ahora.
25 personas con toda una vida por delante truncada por asesinos que -en su mayoría- andan sueltos.
Bassil Dacosta – 12 de febrero
Con un balazo en la cabeza, Bassil, de 24 años, fue el primero en caer el 12 de febrero a pocos metros del Ministerio Público en Caracas.
Juan Montoya – 12 de febrero
Conocido como «Juancho». Pertenecía al colectivo Leonardo José Pirela del 23 de Enero y era parte del Secretariado Revolucionario de Venezuela, que agrupa unos 107 colectivos. A sus 40 años, recibió un disparo en la cara, no muy lejos de Bassil. En las primeras versiones de la Fiscal General de la República, se presumía que Montoya habría sido asesinado con el mismo arma que a Bassil.
Roberto Redman – 12 de febrero
De un tiro en la cabeza le apagaron la vida a Roberto a sus 31 años mientras protestaba en Chacao, la noche del 12 de febrero. Horas antes había sido uno de los que ayudaró a trasladar el cuerpo de Bassil después de ser impactado por una bala. Uno de sus últimos tuits se refirió a eso: «Hoy me pegaron una pedrada en la espalda, un cascazo por la nariz, tragué bomba lacrimógena, cargué al chamo que falleció y, ¿tú qué hiciste?».
José Ernesto Méndez – 17 de febrero
17 años tenía José Ernesto. Protestaba en la avenida Perimetral de Carúpano cuando fue arrollado por un hombre que se hartó del tráfico interrumpido por la manifestación en una Four Runner. El diario La Verdad asera que sufrió tres fracturas de cráneo. Fue ingresado en una clínica y al poco tiempo murió.
Génesis Carmona – 19 de febrero
Génesis a sus 21 años era Miss Turismo Carabobo 2013. Mientras estaba en la avenida Cedeño de Valencia, en la que era su primera marcha, recibió un disparo en la espalda el 18 de febrero. Luchó por su vida por horas pero al día siguiente, perdió la batalla. Estudiaba Mercadeo en la Universidad Tecnológica del Centro de Valencia (Unitec).
Arturo Alexis Martínez – 20 de febrero
De acuerdo a la información suministrada por el mismísimo Nicolás Maduro, Arturo, de 59 años, limpiaba escombros dejados por las barricadas para pasar en su carro frente a la Universidad Fermín Toro en Barquisimeto cuando fue asesinado a balazos. Se conoció que Arturo era hermano del diputado Francisco Martínez.
Momento en el que Maduro anunció la muerte de Arturo, no hay otro respaldo fotográfico disponible
Delia Elena Lobo – 20 de febrero
Alexis Ramírez, gobernador del estado Mérida, informó que a las 9:00 de la noche del 20 de febrero fue asesinada Delia Elena Lobo, de 37 años. El gobernador asegura que la muerte fue producto de las barricadas de las protestas, Delia habría perdido la vida en una alambrada en el sector Santa Bárbara de la ciudad de Mérida.
Momento en el que el gobernador Ramírez anuncia, no hay otro respaldo fotográfico disponible
Julio González – 21 de febrero
Julio, de 25 años, era Fiscal tercero del Ministerio Público del estado Carabobo, de acuerdo a la información aportada por la Fiscal General, Luisa Ortega, falleció luego de perder el control de su carro mientras intentaba esquivar una barricada en la carretera de madrugada.
No hay respaldo fotográfico disponible
Sin identificar – 19 de febrero
Miguel Rodríguez Torres, informó que el 19 de febrero habría muerto una persona en Puerto Ordaz, estado Bolívar. No ofreció más detalles y no existe un registro mayor.
No hay respaldo fotográfico disponible
Elvis Rafael Duran – 21 de febrero
La noche del 21 de febrero, Elvis, de 29 años murió degollado al encontrarse con una guaya tensada que atravesada en la calle donde andaba en su moto. La guaya fue dejada como «sistema de protección» después de haber sido amedrentados los protestantes por motorizados previamente de la zona en la avenida Rómulo Gallegos.
José Alejandro Márquez – 23 de febrero
José Alejandro Márquez fue golpeado brutalmente por efectivos de la Guardia Nacional el día 19 de febrero en La Candelaria, mientras manifestaba. Estuvo en estado de coma hasta el domingo 23 de febrero, cuando le diagnosticaron muerte cerebral.
Geraldine Moreno – 22 de febrero Geraldine fue blanco de un disparo de perdigones a quemarropa en su cara mientras estaba cerca de su casa en el sector Tazajal del municipio Naguanagua la noche del 19 de febrero. La estudiante del quinto semestre de Citotecnología en la Universidad Arturo Michelena murió la tarde del 22 de febrero por complicaciones en su cuadro después de haber sido intervenida en dos oportunidades. Testigos del hecho aseguran que Geraldine estaba junto a cuatro amigos y desde su residencia observaba a las personas que protestaban en la esquina, donde había una barricada, ni siquiera formaba parte de la manifestación.
Jimmy Vargas – 24 de febrero
Jimmy Vargas, de 34 años , intentaba resguardarse de los gases y perdigones que lanzaba la Guardia Nacional en Pueblo Nuevo, Táchira cuando cayó de la mezzanina de un edificio y perdió la vida. Jimmy fue trasladado a una clínica pero las lesiones fueron demasiado severas.
«No me den el pésame, sigan luchando por lo que luchó mi hijo», pidió su madre.
Wilmer Carballo – 24 de febrero
Wilmer Carballo fue alcanzado por una bala cuando participaba en la concentración opositora que había en Cagua. La multitud fue atacada por motorizados armados que dispararon contra la concentración.
Eduardo Anzola – 25 de febrero
Eduardo tenía 29 años, murió al chocar su moto con una barricada en la avenida Michelena cruce con calle Uslar.
Giovanni Pantoja – 28 de febrero
En un disturbio en la urbanización El Trigal, en Valencia, el sargento segundo de la GNB murió tras ser alcanzado por una bala en el ojo. Un compañero contó al diario Notitatarde que sus últimas palabras, antes de salir a la protesta fueron: “No vayas tú, yo voy allá que es donde hay que guerrear”.
Deivy José Durán Useche – 3 de marzo
Era mototaxista y tenía 31 años. Murió en Altamira después de fracturarse el cráneo al caer en una alcantarilla sin tapa, producto de las guarimbas.
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Luis Gutiérrez Camargo – 5 de marzo
En Rubio, estado Táchira, Luis murió al chocar con una barricada mientras andaba en su moto. Al menos esa fue la información suministrada por la ministra de comunicaciones, Delcy Rodríguez, en su cuenta en Twitter.
No hay respaldo fotográfico disponible
José Gregorio Amaris Castillo – 6 de marzo
José Gregorio fue uno de los que resultaron muertos en los disturbios que se presentaron en Los Ruices, cuando motorizados armados irrumpieron en una manifestación, un día después de que el presidente pronunciara su frase, ahora célebre: «candelita que se prenda, candelita que se apaga».
Era mototaxista y tenía 25 años.
Agnes Isaac López Lión – 6 de marzo
A sus 22 años, era sargento de la GNB. Recibió un disparo en la cabeza en los disturbios de Los Ruices, donde también asesinaron a José Gregorio Amaris.
Giselle Rubilar – 9 de marzo
Giselle era chilena y tenía 47 años. Fue impactada en la sien por una bala cuando retiraba escombros de una barricada en Mérida. Maduro informó hace tres días que los culpables habían sido capturados.
Daniel Tinoco Carrillo – 10 de marzo
Era estudiante de la Universidad del Táchira y tenía 24 años. Una bala en el pecho le quitó la vida. Se presume que los autores hayan sido grupos armados motorizados, así lo mantiene Ángel Perdomo, director de la Policía Municipal de San Cristóbal.
Jesús Enrique Acosta – 12 de marzo
Estudiaba Ingeniería de la Universidad de Carabobo y tenía 23 años. Un balazo en la cabeza acabó con su vida cuando corría intentando refugiarse de motorizados armados en La Isabélica, al sur de Valencia.
Ramso Ernesto Bracho Bravo – 12 de marzo
Su muerte fue anunciada por el gobernador del estado Carabobo, Francisco Ameliach, en su cuenta de Twitter. Ramso fue alcanzado por una bala (todavía falta esclarecer dónde). Era capitán de la GNB.
Guillermo Sánchez – 12 de marzo
De acuerdo a lo que anunció el alcalde de Valencia, Miguel Cochiola, en su cuenta de Twitter, Guillermo pintaba su casa en La Isabélica cuando fue impactado por una bala proveniente de los disturbios. Tenía 42 años de edad.
Guillermo era un humilde valenciano que pintaba el frente de su casa cuando una bala en manos de la intolerancia le arrebató la vida
— Miguel Cocchiola (@miguelcocchiola) March 12, 2014
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Una muerte es demasiado, 26 son una aberración. ¿Hasta cuándo?
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